Tal y como soy, tal y como siento. Con mis más y mis menos, mis dudas y mis anhelos. Mi fuerza y mi verdad. Mi vulnerabilidad más neta. Mi risa más auténtica. Mi corazón más sincero. Mi bendita (y traviesa) imperfección. Mi felicidad pintada a colores, con sus tonalidades y sus matices, y sus luces y sus sombras… La esperanza que dibuja cada día, mi manera de (ad)mirar el mundo.
… ¡lo que me queda por aprender, eneeeeeeeee!!! (y a los/las que me sufrís y disfrutáis, paciencia compañeros/as… jijiji!)!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *